Una decoración zen aporta equilibrio y armonía tanto en casa como en tu estilo de vida. Desde Pérez Cánovas te proponemos unos consejos para hacer que tu casa sea un espacio más tranquilo y permita reducir o eliminar el estrés de tu vida. A continuación, podrás poner en práctica los siguientes tips:
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Mínima expresión y superficies limpias y claras
Lo más importante es utilizar muebles neutros y recursos naturales, como la iluminación natural. Minimiza al máximo los adornos murales y no cargues las habitaciones con muchas fotos, cuadros u objetos decorativos.
Obtén una visión limpia y serena teniendo los menores trastos y objetos en casa, ya que cuando están abarrotadas crean sensación de desorden y quitan paz.
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A tus pies
Utiliza colores como el gris o tonos claros, y mejor en acabados de madera para el pavimento. Si el suelo de casa es de estilo industrial, la mejor opción es cubrir zonas con alfombras de lana o algodón para que los pies se mantengan siempre calentitos. ¿A quién no le gusta caminar descalzo por casa?
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Crear diversidad
Los tonos tierra y la gama de grises son siempre un acierto para dar una sensación de calma y bienestar. Es muy importante que cada sala tenga una continuidad visual entre el mobiliario, el pavimento y el color de las paredes.
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Con esencia aromática
¡Qué gusto da que una casa huela bien! Las velas aromáticas o los aceites esenciales son tu solución. Se recomiendan unos aromas más frescos por las mañanas; mientras que por la noche, se aconseja otro tipo de olores que te ayuden a relajar el sistema nervioso y te permita dormir mejor.
Un consejo que no todo el mundo conoce, es que puedes introducir jabones naturales en los cajones y además, colgar en el armario ramilletes de lavanda para que todos esos espacios cerrados tengan buenas notas olfativas.
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Fuentes de luz
Decántate por una iluminación indirecta. Selecciona los rincones que quieras destacar y sitúa un juego de lámparas, o bien, un modelo de pie para dirigir toda la atención. En cuanto a la iluminación artificial, intenta conseguir una atmósfera envolvente con una iluminación cálida. Aunque, lo mejor siempre va a ser la luz natural. No crees muros que impidan la entrada de luz natural.
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Incorporar plantas
¿Eres de los que tiene un jardín en casa? Si todavía no dispones de una planta, añade alguna en tu hogar. Además de que embellecen y purifican el ambiente, encargarse de cuidarla puede llegar a ser un pequeño ritual de meditación. Es una perfecta forma de desconectar de todo por un pequeño momento.
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Hacer la cama todas las mañanas
Este consejo tiene dos variantes: una de aspecto más estético y visual, y otra que tiene que ver con el acto de hacer dicha cama. Es decir, si adoptamos el hábito de hacer todos los días la cama, nos obligará a frenar y empezar la mañana con algo más de calma y tranquilidad.
Aplicando algunos de estos consejos básicos de la filosofía zen en la decoración de nuestras casas, e incluso, en los hábitos que llevamos a cabo en el día a día, podemos llegar a alcanzar un estado de bienestar. Desde Pérez Cánovas te animamos a introducir estas claves tanto en casa como en tu estilo de vida, y ya verás qué fácil es alcanzar un espacio lleno de paz.